Que los más pequeños sean eficientes...no tiene precio
Enseñar a los niños a ahorrar energía, agua o a respetar el medio ambiente, puede suponer que el futuro de nuestro planeta quede en muy buenas manos.
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Desde hace unos meses podemos ver en la televisión un anuncio de MasterCard en la que un niño ayuda a su padre a ser más respetuoso con el medio ambiente. Bajo el lema, ya conocido, "que tu hijo te enseñe a respetar el medio ambiente no tiene precio", el niño anima a su padre a utilizar una bolsa reutilizable al hacer la compra o a adquirir una bombilla de bajo consumo en lugar de una tradicional.
Sin duda, que un niño sea consciente de la necesidad de ahorrar energía o de respetar el medio amiente, no tiene precio. Y por ello, es fundamental sensibilizar a los más pequeños de la casa en este sentido.
En el artículo 25 de la Agenda 21, firmada por la Organización de Naciones Unidas (ONU) para promover el desarrollo sostenible, dice lo siguiente; "los niños no sólo heredarán las responsabilidad de cuidar la Tierra, sino que, en muchos países en desarrollo, constituyen casi la mitad de la población. Además, los niños de los países en desarrollo y de los países industrializados son igualmente vulnerables en grado sumo a los efectos de la degradación del medio ambiente. También son partidarios muy conscientes de la idea de cuidar el medio ambiente. Es menester que se tengan plenamente en cuenta los intereses concretos de la infancia en el proceso de participación relacionado con el medio ambiente y el desarrollo, a fin de salvaguardar la continuidad en el futuro de cualesquiera medidas que se tomen para mejorar el medio ambiente".
Está en las manos de los niños el futuro de nuestro planeta y en las de los padres enseñarles e infundirles los valores necesarios para que lo cuiden y respeten como se merece. Por eso, desde pequeños deben aprender a ahorrar energía y cuidar el medio ambiente.
Tim Hoelly, una empresa de diseño inglesa, ha sabido ver esta misión encomendada a los padres y ha querido facilitarles la tarea, combinándola con la diversión y el entretenimiento; el mejor elemento para captar la atención de un niño.
Tio, es un gadget con forma de muñeco, que en función del color de su luz indicará a los niños si se están portando bien o no. Si Tío está verde, será que está feliz y en consecuencia que los pequeños están ahorrando energía. Sin embargo, si está en rojo, será que está enfadado y por tanto, que se está derrochando energía.
Además, Tío permite a los padres valorar en qué medida sus hijos están aprendiendo, pues el aparato envía a un programa informático los datos sobre el ahorro que se va consiguiendo.
El Power Hog es uno de los ganadores de los premios "Greener Gadgts 2009". Este cerdito con forma de hucha pretende enseñar a los niños a asociar el consumo económico con el energético. Mientras que la cola del cerdito se conecta a la toma de corriente, el morro irá enchufado al dispositivo que el niño quiera utilizar. De tal forma, que si quieren que funcione deberán introducir dinero en la ranura, para conseguir, por ejemplo, 30 minutos de electricidad.
Hasta hace una década los ordenadores e Internet eran una herramienta de trabajo que sólo unos pocos podían disfrutar, sin embargo, hoy en día, incluso los más pequeños de la casa están completamente familiarizados con la red.
Existen numerosas páginas web dedicadas a promover la eficiencia energética y el respeto por el medio ambiente en la infancia. En la página de Ecoembes, por ejemplo, la sección Aprender jugando, los niños pueden ayudar a Alex y Robix a recoger y reciclar todos los globos, latas, platos, papeles de regalos que han quedado en casa del primero después de celebrar su cumpleaños.
Bio Tempoacqua Amanda y Bio Tempoacqua Tom, son las figuritas de un niño y una niña, que llevan un reloj de arena y que colocándose en la ducha o el lavabo, respectivamente indicarán a los niños cuanto tiempo llevan con el grifo del agua abierto y en qué momento deberían cerrarlo.
Los dos aparatos forman parte de la línea Biohabitat de Imaginarium, una marca de juguetes de la que ya hemos hablado en el Canal de Eficiencia Energética, y que a través de sus juguetes pretende hacer de los más pequeños de la casa abanderados de la eficiencia.
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